Cada día en mi consulta de Gastroenterología y Nutrición veo niños/adolescentes diagnosticados de AUTISMO y/o TRASTORNOS DEL ESPECTRO AUTISTA  y  en un 90% de casos, ellos o sus familias han sido martirizados con el seguimiento de dietas especiales con gluten, con o sin lactosa, alimentós suprimides sin nigún criterio, que más bien pueden perjudicar la salud y desarrollo de estos pacientes. Complicando las cosas, los niños con autismo pueden tener una serie de problemas de salud relacionados con la alimentación, según la Academia de Nutrición y Dietética. (http://bit.ly/2Vzw1Bg) Pueden, por ejemplo, ser sensibles al sabor, olor, color o textura de ciertos alimentos y comer una selección muy limitada de artículos o tener dificultad para concentrarse en las comidas. También pueden ser propensos al estreñimiento o tener interacciones con medicamentos que afectan su apetito.

Pero, ¿qué esel trastorno del espectro autista (TEA)?; veamos que dice MEDLIN PLUS:  es una afección neurológica y de desarrollo que comienza en la niñez y dura toda la vida. Afecta cómo una persona se comporta, interactúa con otros, se comunica y aprende. Este trastorno incluye lo que se conocía como síndrome de Asperger,  el trastorno generalizado del desarrollo no especificado. Se lo llama «trastorno de espectro» porque diferentes personas con TEA pueden tener una gran variedad de síntomas distintos. Estas pueden tener problemas para hablar con otra persona  y es posible que no lo miren a los ojos cuando se les les habla. Además, pueden tener intereses limitados y comportamientos repetitivos. Es posible que pasen mucho tiempo ordenando cosas o repitiendo una frase una y otra vez. Parecieran estar en su «propio mundo».

En niños (Eunice Kennedy Shriver National Institute, Los síntomas conductuales del trastorno del espectro autista (ASD) suelen aparecer en una etapa temprana del desarrollo. Muchos niños muestran síntomas de autismo entre los 12 a 18 meses de edad o antes. Algunos de los síntomas tempranos de autismo son:⁴

• Problemas con el contacto visual
• No responden a su nombre
• Problemas para seguir la mirada de otra persona o un dedo que señala un objeto (o “atención conjunta”)
• Poca habilidad para los juegos que requieran «hacer personajes de  cuentos» e imitar
• Problemas con la comunicación no verbal

Muchos padres no conocen estos síntomas “tempranos” del autismo y comienzan a pensar en el autismo cuando los niños no empiezan a hablar a la edad habitual.
La mayoría de los niños con autismo no son diagnosticados hasta después de los 3 años, aunque los profesionales de la salud con frecuencia observan problemas en el desarrollo antes de esa edad.

Las investigaciones muestran que la detección temprana y la intervención temprana mejoran ampliamente los resultados, por lo que es importante tratar de detectar estos síntomas lo antes posible; algunos padres conscientes de ello, se precipitan en admministrar dietas que son nada efectivas o incluso pejudiciales.. Complicando las cosas, como hemos dicho antes, los niños con autismo pueden tener una serie de problemas de salud relacionados con la alimentación, por ejemplo, ser sensibles al sabor, olor, color o textura de ciertos alimentos y comer una selección muy limitada de artículos o tener dificultad para concentrarse en las comidas. También pueden ser propensos al estreñimiento o tener interacciones con medicamentos que afectan su apetito.

Es interesante leer el trabajo del Dr. David Fraguas, autor líder del estudio e investigador del Hospital General Universitario Gregorio Marañón y la Universidad Complutense de Madrid en España, publicado en Pediatrics “on line·”, sobre los suplementps que pueden favorecer a estos niño, no curarlos, pero sí mejorar muchos de sus síntomas. Han demostrado que (Reuters Health Information, Vitamins, Omega-3 Supplements May Improve Autism Symptoms. By Lisa Rapaport, October 22, 2019)  los niños con autismo que toman suplementos de vitaminas y ácidos grasos omega-3 podrían tener menos síntomas que los niños que no los toman, según su meta-análisis.

Los investigadores examinaron los datos de 27 ensayos que incluían un total de 1,028 niños con trastorno del espectro autista. Los niños fueron seleccionados al azar para tomar varios suplementos dietéticos, incluyendo vitaminas u omega-3, o para tomar un placebo en su lugar.

Los omega-3 y los complementos vitamínicos fueron más efectivos que la píldora de placebo para mejorar varios síntomas, funciones y dominios clínicos. los beneficios variaron en los ensayos, pero incluyeron la mejora del lenguaje y las habilidades sociales, la reducción de los comportamientos repetitivos, la mejora de la atención, la disminución de la irritabilidad y las dificultades conductuales, y la mejora del sueño y la comunicación.

Aunque el análisis se basó en experimentos controlados (el estándar de oro para probar la efectividad de las intervenciones médicas), los estudios individuales fueron demasiado variados en cuanto a los complementos que probaron y cómo midieron los resultados como para sacar conclusiones generales sobre qué tipo o cantidad de complementos podría ser ideal para los niños autistas,.

«Se desconocen los mecanismos subyacentes implicados en la eficacia potencial de las intervenciones dietéticas en el trastorno del espectro autista, dijo Fraguas por correo electrónico. «Nuestro estudio no evalúa esta importante pregunta y la literatura actual no es concluyente.»

Alrededor de 1 de cada 59 niños tiene un trastorno del espectro autista, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. Se diagnostica con mucha más frecuencia en los niños.

Los primeros síntomas pueden variar, pero pueden incluir comportamientos repetitivos como aleteo de las manos o balanceo del cuerpo, resistencia extrema a los cambios en la rutina y, a veces, agresión o autolesión. La terapia conductual, educativa, del habla y del lenguaje puede ayudar a reducir la gravedad de los síntomas en algunos niños.

Ningún medicamento ni dieta  puede curar el autismo o tratar los síntomas principales, pero algunos medicamentos pueden ayudar a los niños a funcionar mejor al mejorar síntomas,  como la falta de atención, la hiperactividad, la depresión o las convulsiones, según los CDC centro de control de USA.

COMENTARIO DEL DR TORMO: no es extraño que los omega- 3 mejoren  a estos niños, dada la importancia de los ácidos grasos poliinsaturados omega-3 en el metabolismo y formación  cerebral, según los primeros estudios del Prof. Crawford,  Prof. Angel Gil, Prof. Ballabriga y Dra Martinesz,  bien conocidos por las casas comerciales que producen lehe infantiles muchas adicionadas de omega-3.

Igualmente es importante el trabajo que presentamos en un congreso reciente en Glasgow y  DUBAI sobre la importanica  de la lactosa por su contenido de galactosa, en ciertas funciones cerebrales ejecutivas, comprobadas con el test BRIEF 2 (Behavious rating inventory of execeutive functions); ver paginas anteriores de esta web.