En la alimentación del bebé, las concentraciones de grasa (Wikipedia) aumentan desde 2 g/100 ml en el calostro, hasta alrededor de 4 a 4,5 g/100 ml a los 15 días post parto. De ahí en adelante siguen siendo relativamente estables, pero con bastantes variaciones interindividuales tanto en el contenido total de grasa, como en la composición de los ácidos grasos. (Crawford, 1976) Hay fluctuaciones diurnas, que son dependientes de la frecuencia de las mamadas. También hay una importante variación dentro de una misma mamada, siendo la leche del final de la mamada, 4 a 5 veces más concentrada en grasa que la primera. Se cree que esta mayor concentración de grasa de la segunda parte de la mamada tiene que ver con el mecanismo de saciedad del niño. Cuando la madre se extrae la leche, debe tener en cuenta esta diferencia, especialmente en el caso de prematuros, ya que la leche del final tiene más calorías.
No hay que demonizar la grasa ni el colesterol de la dieta; ambas son básicas para nuestro buen funcionamiento; en pediatría su importancia aumenta debido a los cambios rápidos en los primeros meses de vida sobre todo, por el crecimiento, multiplicación celular, hormonas, sales biliares, formación neuronal...etc. Así la leche de humana tiene más grasa y colesterol , que la de vaca
grasa ( gr/100 ml) colesterol (mg/100 ml)
leche de vaca: 3 gr 15 mg
leche humana: 4,2 gr colostro: 27 mg; l. madura: 16 mg
Al igual que la lactosa que es superior en cantidad en la leche de madre que en la de vaca, con las grasas y el colesterol sucede lo mismo; su cantidad en la leche humana depende los días de vida del bebé , del momento del día, y del tiempo que esta succionando el lactante; más grasa al final de la tetada; por ello no hemos de demonizar su aporte. Como veremos a continuación tampoco en la edad adulta.
Siempre ha sido motivo de discusión el pronunciarse sobre cuantos huevos es sano comer en la salud y en enfermedades como diabetes tipo 2 u obesidad. Es muy interesante el resumen de Marlene Busko, de Medscape, May 16, 2018 sobre este tema To Eat Eggs or Not? That Is the Question in Diabetes.
A favor del consumo de huevos:
El Dr. Nicholas R. Fuller, del Instituto Boden de Obesidad, Nutrición, Ejercicio y Trastornos Alimenticios de la Universidad de Sídney, Australia, y colegas, realizó una investigación, parte de DIABEGG (
Am J Clin Nutr. Published online May 7, 2018.
Abstract), que sugiere que entre los pacientes con sobrepeso u obesos con prediabetes o diabetes tipo 2, aquellos que comieron 12 huevos/semana o más (dieta alta en huevos) tuvieron niveles sanguíneos de marcadores de enfermedad cardiovascular similares a los que comieron menos de 2 huevos/semana (dieta baja en huevos) en un estudio de un año de duración.
"Estos hallazgos sugieren que es seguro en personas de alto riesgo de diabetes tipo 2 y en las que tienen diabetes tipo 2, incluir huevos regularmente en su dieta, que es una fuente de alimento aceptable y conveniente, ", concluyen los investigadores.
Este trabajo no pretende implicar "que las personas con diabetes (o cualquier otra persona) no deben preocuparse por sus niveles de colesterol en sangre, sólo muestra que una ingesta de huevo bastante alta (y por lo tanto de colesterol) no tuvo un impacto adverso sobre el colesterol en sangre en este estudio,
Según Jyrki K. Virtanen, PhD, profesor adjunto de epidemiología nutricional de la Universidad de Finlandia Oriental, Kuopio, en general, la ingesta de colesterol en la dieta tiene un impacto bastante pequeño en los niveles de colesterol sérico o en la mayoría de las personas y agregó que la calidad de la grasa dietética tiene un impacto mucho mayor.
El mensaje conduce a afirmar que "está bien incluir huevos en la dieta, incluso si tienes diabetes tipo 2". Muchas personas disfrutan comiendo huevos, y los huevos se usan en muchas recetas y platos, así que hace la vida más fácil si uno no tiene que restringir severamente el consumo de huevos". El número ideal de huevos por semana que las personas pueden consumir depende de la genética, la salud general y la dieta general, continuó. Según la mayoría de las investigaciones, "un huevo al día debería estar bien para la mayoría de la gente, pero incluso, una ingesta aún mayor también podría estar bien".
Además desde el punto de vista ambienal, los huevos tienen uno de los impactos más bajos en las emisiones de gases de efecto invernadero entre las fuentes de proteína animal", añadió.David Spence, MD, profesor de neurología y farmacología clínica en Western University e investigador en el Stroke Prevention & Atherosclerosis Research Centre, en Londres, Ontario, reiteró su creencia de que no hay cantidad de yema de huevo que sea segura para comer para las personas con diabetes, o en riesgo de enfermedad cardiovascular. Él dijo, sin embargo, que las claras de huevo se pueden consumir tranquilamente.
Conclusiones y directrices de investigación contradictorias
Según otros estudios epidemiológicos (Fuller y colegas ) en personas con diabetes tipo 2 (pero no de la población general), por ejemplo, la mayor ingesta de huevos se ha asociado con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular (ECV) y una mortalidad más temprana, aunque otros estudios controlados en personas con prediabetes o diabetes tipo 2 han mostrado efectos predominantemente favorables de una mayor ingesta de huevo sobre los factores de riesgo cardiovasculares y metabólicos.
Y para añadir más leña al fuego, diferentes países y sociedades tienen diferentes recomendaciones. Por ejemplo, en personas con diabetes tipo 2, la British Heart Foundation y Diabetes UK no recomiendan limitar el colesterol o el consumo de huevos, pero la National Heart Foundation of Australia recomienda un máximo de 6 huevos a la semana. La American Diabetes Association solía recomendar limitar el consumo total de colesterol a 300 mg/día (un huevo contiene alrededor de 200 mg de colesterol), pero recientemente eliminaron este límite.
Ningún efecto adverso sobre los marcadores de enfermedad cariovascular en DIABEGG
En DIABEGG, 128 adultos de 18 años o más con diabetes tipo 2 o prediabetes y un índice de masa corporal (IMC) de al menos 25 kg/m2 fueron asignados al azar a una dieta saludable para bajar de peso, ya sea alta o baja en huevos.
Las participantes cumplieron con su ingesta de huevos: a los 6 y 12 meses, los del grupo de consumo alto de huevos tomaron una media de 12.2 y 10.5 huevos/semana, respectivamente, y las del grupo de consumo bajo de huevos tomaron 1.0 y 1.1 huevos/semana, respectivamente.
Los pacientes en ambos grupos perdieron aproximadamente 2 kg al final de la fase de pérdida de peso activa de 3 meses y otros 1 kg durante los siguientes 6 meses.
De 3 a 12 meses, los participantes en ambos grupos tuvieron cambios similares en los lípidos (colesterol HDL, colesterol LDL, colesterol total y apolipoproteína B), marcadores inflamatorios (proteína C reactiva, interleucina-6 y selectina E soluble), marcadores de estrés oxidativo (F2-isoprostanes) y marcadores glucémicos (glucosa, HbA1c, adiponectina y 1,5-anhidroglucitol).
Pero según Spence, lo importante es que "los huevos aumentan el riesgo de diabetes, y en las personas con diabetes aumentan el riesgo de ataques cardiacos” señalando que las yemas de huevo son una de las fuentes más concentradas de colesterol. Como parte de su argumento, cita un estudio griego en el que un huevo al día se asoció con un aumento cinco veces mayor del riesgo coronario en pacientes con diabetes (J Intern Med. 2006;259:583-591).
Virtanen y Fuller dice que es "cierto que según algunos estudios epidemiológicos, se ha demostrado que una mayor ingesta de huevos se ha asociado con un mayor riesgo de diabetes y de Enfermedad Cardio- Vascular ( ECV) en las personas con diabetes .
Pero en un meta-análisis de respuesta a la dosis de estudios de cohorte prospectivos de los que fue coautor (Br J Nutr. 2016;115:2212-2218), "el mayor riesgo de diabetes se observa principalmente en los estudios epidemiológicos de los EE. UU., y no en otros países", señaló además que en los EE. UU., una mayor ingesta de huevos se relaciona con más tabaquismo, menos actividad física y una mayor ingesta de carne roja procesada, lo que podría explicar en parte los resultados, agregó.
Y en el estudio prospectivo del Factor de Riesgo de Enfermedad Cardiovascular Isquémica de Kuopio (KIHD, por sus siglas en inglés) basado en la población (Am J Clin Nutr. 2015;101:1088-1096), del cual Virtanen fue el autor principal, una mayor ingesta de huevos se asoció con un menor riesgo de diabetes de aparición reciente en hombres de mediana edad y mayores en Finlandia.
"Aunque los huevos tienen un alto contenido de colesterol en la dieta, y las personas que tienen diabetes tipo 2 tienden a tener niveles más altos de colesterol de lipoproteína de baja densidad (LDL) "malo", este estudio apoya la investigación existente que muestra que el consumo de huevos tiene poco efecto sobre los niveles de colesterol en la sangre de las personas que los consumen", explicó Fuller en una declaración de la Universidad de Sídney.
La cadena bioquímica de las yemas de huevo conduce al endurecimiento de las arterias
Spence explicó el proceso bioquímico que él cree que contribuye a los efectos adversos de los huevos en pacientes con diabetes, tabaquismo, menos actividad física y una mayor ingesta de carne roja procesada,
Las yemas de huevo son ricas en fosfatidilcolina, que es convertida por las bacterias intestinales en trimetilamina, que luego se oxida en el hígado en N-óxido de trimetilamina (TMAO), "y el TMAO es malo para las arterias", afirma.
"El TMAO también se produce a partir de carnitina en la carne (cuatro veces más que en el pollo), por lo que las yemas de huevo y la carne roja tienen un doble efecto. No deben ser consumidos por personas con riesgo de sufrir un ataque al corazón o un derrame cerebral, lo que incluye a las personas con diabetes".
Spence sostiene que "comer yemas de huevo no está bien" para las personas con diabetes o prediabetes. "Recomiendo a mis pacientes que utilicen claras de huevo, o lo que es más agradable, sustitutos a base de clara de huevo", dijo a Medscape Medical News.
Fuller: "Comer huevos como parte de una dieta saludable está bien".
Sin embargo, Fuller contesta que "a pesar de los diferentes consejos sobre los niveles seguros de consumo de huevos para las personas con prediabetes y diabetes tipo 2, nuestra investigación indica que las personas no necesitan abstenerse de comer huevos si esto es parte de una dieta saludable".
Además, "los huevos son una fuente de proteínas y micronutrientes que podrían respaldar una serie de factores de salud y dietéticos, como ayudar a regular la ingesta de grasas e hidratos de carbono, la salud ocular y cardíaca, los vasos sanguíneos sanos y los embarazos sanos", concluye.
Am J Clin Nutr. Publicado en línea el 7 de mayo de 2018. Resumen
NOTA DEL DR TORMO: he encontrado muy intetresante lo que sucede con la carnitina, a la que están muy aficinados los culturistas, creyendo que facilita la formación de masa muscular, y lo que hace es formar TMAO que endurece las arterias
Se puede concluir que se puede comer un huevo al día, o más, incluso pacientes con diabetes tipo 2 u obesidad, además restringir la grasa saturada, comer poca carne roja, hacer ejercicio, no fumar, vida tranquila..etc
En los obesos y diabéticos tipo 2 se deben controlar periodicamente las cifras de colesterol y fracciones.