Alcohol, café y te en embarazo y lactancia
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Una parte importante de la nutrición es la que hace referencia a la de la madre en ciernes, la mujer embarazada y la que da el pecho… ¿que debe comer y evitar para conseguir el mejor desarrollo y salud del embrión y feto y posteriormente una superior calidad de su leche?
Afortunadamente la nutrición a través de la leche de pecho del recién nacido y lactante está muy bien defendida. Hace unos años se publicó (Breast milk composition in Ethiopian and Swedish mothers. II. Lactose, nitrogen, and protein contents. B Lönnerdal E Forsum M Gebre-Medhin L Hambraeus. The American Journal of Clinical Nutrition, Volume 29, Issue 10, 1 October 1976, Pages 1134–1141), que la leche materna de madres etíopes desfavorecidas y de otras privilegiadas fue recolectada en diferentes etapas de la lactancia y analizada para obtener nitrógeno total, nitrógeno no proteico, lactosa y proteínas individuales de la leche (lactoferrina, α-lactalbumina, albúmina sérica, IgG e IgM). Estos valores y el volumen de leche de una comida se compararon con los resultados correspondientes de madres suecas bien alimentadas. No se encontraron diferencias significativas entre los niveles de estos constituyentes o los volúmenes de leche entre los dos grupos de madres etíopes. Cuando se hizo una comparación entre la leche materna de estos dos grupos etíopes y la del grupo sueco, los dos primeros mostraron valores significativamente más altos de la proteína fijadora de hierro lactoferrina.
Es curioso comprobar como la naturaleza antepone el bien del bebé al de la madre.
Por otra parte sabemos que esta protección no llega a impedir el paso por la leche de madre de productos químicos no recomendables como fenoles y compuestos orgánicos clorados (XiaoyunYeZsuzsannaKuklenyikLarry L.NeedhamAntonia M.Calafat. Journal of Chromatography B, Volume 831, Issues 1–2, 2 February 2006, Pages 110-115), pero ¿ que sucede con otros productos muy al uso actualmente de consumo muchas veces diario como es el alcohol, café y te?
ALCOHOL: Las tasas de exposición prenatal al alcohol en el Reino Unido se han mantenido altas (First UK Estimates of Children Who Could Have Conditions Caused by Prenatal Drinking, Theresa Bebbington, November 30, 2018
Estimaciones recientes sugieren que tres cuartas partes de las mujeres en el Reino Unido beben algo de alcohol durante el embarazo, y una tercera parte en niveles abusivos. Obviamente en el embarazo no se debe beber ni una gota de alcohol pues pasa la placenta y`puede `producir retraso mental, hipodesarrollo y el llamado síndrome alcohólico fetal….pero durante la lactancia ¿se puede consumir?.
La recomendación general es la de no beber alcohol, tampoco durante la lactancia. Es una sustancia nociva que penetra en el torrente sanguíneo y pasa a la leche que toma el bebé, por tanto es preferible evitarlo (19 Mayo 2014 - Actualizado 1 Octubre 2017, 00:36. LOLA ROVATI@Lolarovati). En una revisión muy correcta de LOLA ROVATI, considera que no hay investigaciones concluyentes que vinculen el consumo moderado de alcohol con un deterioro cerebral del bebé, por tanto las recomendaciones en cuanto al consumo ocasional, es decir tomarse una copa de vez en cuando tampoco está prohibido si se tienen en cuenta algunos factores.
Según la web e-lactancia, un sitio de referencia sobre los medicamentos que se pueden tomar durante la lactancia, señala el alcohol como de riesgo nivel 2. Es decir, de riesgo alto. Se recomiendo no consumir o consumir ocasionalmente de una forma moderada. El consumo ocasional en pequeñas cantidades no se considera dañino para el bebé.
El nivel de alcohol en la sangre se utiliza para definir legalmente si se está o no embriagado (MedlinePlus) El límite legal de alcohol en la sangre generalmente está entre 0,08 y 0,10 en la mayoría de los estados de Estados Unidos. En España: 0,5 gramos por litro en sangre (o 0,25 mg/l de aire espirado); excepto en los casos de conductores con menos de 2 años de carné o los profesionales, en los que la cifra es de 0,3 g/l de alcohol en sangre, que equivale a 0,15 mg/l en aire espirado.
Es posible que las personas que frecuentemente beben alcohol no tengan síntomas hasta que alcancen niveles de alcoholemia más altos, ya que el enzima que metaboliza el alcohol, la alcohol deshidrogenasa hepática, se estimula con el consumo de alcohol.
Recordad que la cerveza tiene 4 gramos de alcohol por 100 cc., el vino tiene 12 grs por 100 cc y el whisky tiene 40 gr por 100 cc.
Si se bebe alcohol, es mejor hacerlo con moderación, no consumir más de 1 trago al día si es una mujer y no más de 2 si es un hombre. Un trago se define como 12 onzas (350 mL) de cerveza, 5 onzas (150 mL) de vino o 1.5 onzas (45 mL) de licor fuerte.
En páginas anteriores de esta web, se han citado trabajos que han demostrado que esa cantidad citada hay que consumirla una vez a la semana, para evitar daños cerebrales sobre cuerpo callosos y estructuras vinculadas a la memoria.
En la mujer que lacta es perjudicial si consume más de la primera cantidad citada diaria y de forma crónica (1 trago al día, trago que se define como 12 onzas (350 mL) de cerveza, 5 onzas (150 mL) de vino o 1.5 onzas (45 mL) de licor fuerte. , ya que daña seriamente al bebé pudiendo llegar a causarle un coma alcohólico. Además inhibe la secreción de prolactina y oxitocina, hormonas responsables de la producción y eyección de la leche.
También es importante tener en cuenta el tiempo que ha transcurrido desde que se bebe hasta que se da el pecho. El alcohol pasa rápidamente al torrente sanguíneo, pero también sus niveles descienden rápidamente. Alcanza su máximo nivel entre los 30 y los 60 minutos después de haber bebido, por tanto si vas a tomar una copita, sería conveniente hacerlo después de una toma ya que pasarán unas tres horas hasta la próxima toma y en ese momento el nivel de alcohol será muy bajo o nulo.
El problema se plantea con los bebés recién nacidos, en los que las tomas son muy seguidas y varias veces al día, incluso también durante la noche. Por eso se suele recomendar mantener la abstinencia durante los tres primeros meses del bebé. En ese caso, será mejor esperar a que el niño crezca y las tomas sean más espaciadas.
En conclusión, si no puedes evitarlo y quieres tomar una copa en el período de lactancia, puedes tomar una pequeña cantidad de alcohol de forma ocasional y siempre alejada de las tomas.
CAFEÍNA
Las mujeres embarazadas que consumen cafeína, ya sea de café o té, tienen bebés más pequeños que las que se abstienen del estimulante durante el embarazo, sugiere una investigación recientem (Reuters Health, News . Caffeine in Tea, Coffee May Be Equally Risky to Fetus. By Anne Harding, November 27, 201. LING-WEI´-CHEN, The American Journal of Clinical Nutrition, en línea el 19 de octubre).
Incluso las mujeres que tomaron menos de 200 miligramos de cafeína, que es el límite seguro durante el embarazo según el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos (American College of Obstetricians and Gynecologists, ACOG), tuvieron un riesgo significativamente mayor de dar a luz prematuramente o de tener un bebé con bajo peso al nacer.
En un correo electrónico Ling-Wei Chen, autora líder del estudio e investigadora del Colegio Universitario de Dublín en Irlanda, señaló: "Basándonos en las asociaciones consistentes que observamos, y debido a que muchos embarazos no son planeados, recomendaríamos a las mujeres que están embarazadas o que buscan quedar embarazadas que al menos limiten su consumo de café y té con cafeína",
En la mayoría de esos estudios, el café fue la principal bebida con cafeína consumida. Para el estudio actual, el equipo de Chen observó a 941 parejas madre-hijo nacidas en Irlanda, donde la gente bebe más té que café. Casi la mitad de las madres del estudio bebieron té, mientras que cerca del 40 por ciento bebieron café.
Cada 100 miligramos adicionales de cafeína consumidos diariamente durante el primer trimestre del embarazo se asoció con una reducción de 72 gramos (2.5 onzas) en el peso al nacer, así como una reducción significativa en la edad gestacional, la longitud del parto y el perímetro cefálico.
Las mujeres que tomaron la mayor cantidad de cafeína tuvieron bebés que pesaban unos 170 gramos (6 onzas) menos que los que consumían menos, encontraron los investigadores. Si la cafeína provenía del café o del té no causó ninguna diferencia en los resultados. "La alta ingesta de cafeína puede resultar en un flujo sanguíneo restringido en la placenta, lo que podría afectar posteriormente el crecimiento fetal", explicó Chen. "La cafeína también puede atravesar la placenta fácilmente, y debido a que la eliminación de la cafeína se ralentiza a medida que avanza el embarazo, la acumulación de cafeína puede ocurrir en los tejidos fetales."
Una taza de 12 onzas (355 ml) de café colado contiene aproximadamente 200 mg de cafeína, pero el té generalmente contiene menos cafeína y la cantidad puede variar según el tipo de té y el tiempo que se haya colado. La compañía Lipton Tea, por ejemplo, dice que su té negro contiene alrededor de 83 mg de cafeína en una taza de 12 onzas.
El público no parece dar importancia al contenido de cafeína del té, señaló la autora principal del estudio, Catherine Phillips, investigadora del Colegio Universitario de Dublín. "Por lo tanto, la ingesta materna tanto de té como de café debe tenerse en cuenta al tratar de reducir al mínimo la ingesta total de cafeína durante el embarazo.
La ACOG afirma que consumir menos de 200 miligramos de cafeína al día durante el embarazo "no parece ser un factor importante que contribuya al aborto espontáneo o al nacimiento prematuro". La Organización Mundial de la Salud recomienda que las mujeres consuman menos de 300 mg de cafeína al día durante el embarazo.
CAFEÍNA Y LACTANCIA
La cafeina contenida en el café y las bebidas de cola pasa a la leche materna, pero sólo a dosis altas (si la madre ingiere tres tazas al día o más de café) se producen insomnio o irritabilidad en el bebé; algunos lactantes son más sensibles, y con menos dosis ya presentan síntomas.
Otro aspecto es la hora a la que se ingieren las bebidas: la cafeína tiene una vida media de unas 5 horas, esto quiere decir que tras ese tiempo gran parte de la dosis se ha eliminado, y por tanto se puede tomar café o un poco de bebida de Cola 5h antes de dar el pecho.
Afortunadamente la nutrición a través de la leche de pecho del recién nacido y lactante está muy bien defendida. Hace unos años se publicó (Breast milk composition in Ethiopian and Swedish mothers. II. Lactose, nitrogen, and protein contents. B Lönnerdal E Forsum M Gebre-Medhin L Hambraeus. The American Journal of Clinical Nutrition, Volume 29, Issue 10, 1 October 1976, Pages 1134–1141), que la leche materna de madres etíopes desfavorecidas y de otras privilegiadas fue recolectada en diferentes etapas de la lactancia y analizada para obtener nitrógeno total, nitrógeno no proteico, lactosa y proteínas individuales de la leche (lactoferrina, α-lactalbumina, albúmina sérica, IgG e IgM). Estos valores y el volumen de leche de una comida se compararon con los resultados correspondientes de madres suecas bien alimentadas. No se encontraron diferencias significativas entre los niveles de estos constituyentes o los volúmenes de leche entre los dos grupos de madres etíopes. Cuando se hizo una comparación entre la leche materna de estos dos grupos etíopes y la del grupo sueco, los dos primeros mostraron valores significativamente más altos de la proteína fijadora de hierro lactoferrina.
Es curioso comprobar como la naturaleza antepone el bien del bebé al de la madre.
Por otra parte sabemos que esta protección no llega a impedir el paso por la leche de madre de productos químicos no recomendables como fenoles y compuestos orgánicos clorados (XiaoyunYeZsuzsannaKuklenyikLarry L.NeedhamAntonia M.Calafat. Journal of Chromatography B, Volume 831, Issues 1–2, 2 February 2006, Pages 110-115), pero ¿ que sucede con otros productos muy al uso actualmente de consumo muchas veces diario como es el alcohol, café y te?
ALCOHOL: Las tasas de exposición prenatal al alcohol en el Reino Unido se han mantenido altas (First UK Estimates of Children Who Could Have Conditions Caused by Prenatal Drinking, Theresa Bebbington, November 30, 2018
Estimaciones recientes sugieren que tres cuartas partes de las mujeres en el Reino Unido beben algo de alcohol durante el embarazo, y una tercera parte en niveles abusivos. Obviamente en el embarazo no se debe beber ni una gota de alcohol pues pasa la placenta y`puede `producir retraso mental, hipodesarrollo y el llamado síndrome alcohólico fetal….pero durante la lactancia ¿se puede consumir?.
La recomendación general es la de no beber alcohol, tampoco durante la lactancia. Es una sustancia nociva que penetra en el torrente sanguíneo y pasa a la leche que toma el bebé, por tanto es preferible evitarlo (19 Mayo 2014 - Actualizado 1 Octubre 2017, 00:36. LOLA ROVATI@Lolarovati). En una revisión muy correcta de LOLA ROVATI, considera que no hay investigaciones concluyentes que vinculen el consumo moderado de alcohol con un deterioro cerebral del bebé, por tanto las recomendaciones en cuanto al consumo ocasional, es decir tomarse una copa de vez en cuando tampoco está prohibido si se tienen en cuenta algunos factores.
Según la web e-lactancia, un sitio de referencia sobre los medicamentos que se pueden tomar durante la lactancia, señala el alcohol como de riesgo nivel 2. Es decir, de riesgo alto. Se recomiendo no consumir o consumir ocasionalmente de una forma moderada. El consumo ocasional en pequeñas cantidades no se considera dañino para el bebé.
El nivel de alcohol en la sangre se utiliza para definir legalmente si se está o no embriagado (MedlinePlus) El límite legal de alcohol en la sangre generalmente está entre 0,08 y 0,10 en la mayoría de los estados de Estados Unidos. En España: 0,5 gramos por litro en sangre (o 0,25 mg/l de aire espirado); excepto en los casos de conductores con menos de 2 años de carné o los profesionales, en los que la cifra es de 0,3 g/l de alcohol en sangre, que equivale a 0,15 mg/l en aire espirado.
Es posible que las personas que frecuentemente beben alcohol no tengan síntomas hasta que alcancen niveles de alcoholemia más altos, ya que el enzima que metaboliza el alcohol, la alcohol deshidrogenasa hepática, se estimula con el consumo de alcohol.
Recordad que la cerveza tiene 4 gramos de alcohol por 100 cc., el vino tiene 12 grs por 100 cc y el whisky tiene 40 gr por 100 cc.
Si se bebe alcohol, es mejor hacerlo con moderación, no consumir más de 1 trago al día si es una mujer y no más de 2 si es un hombre. Un trago se define como 12 onzas (350 mL) de cerveza, 5 onzas (150 mL) de vino o 1.5 onzas (45 mL) de licor fuerte.
En páginas anteriores de esta web, se han citado trabajos que han demostrado que esa cantidad citada hay que consumirla una vez a la semana, para evitar daños cerebrales sobre cuerpo callosos y estructuras vinculadas a la memoria.
En la mujer que lacta es perjudicial si consume más de la primera cantidad citada diaria y de forma crónica (1 trago al día, trago que se define como 12 onzas (350 mL) de cerveza, 5 onzas (150 mL) de vino o 1.5 onzas (45 mL) de licor fuerte. , ya que daña seriamente al bebé pudiendo llegar a causarle un coma alcohólico. Además inhibe la secreción de prolactina y oxitocina, hormonas responsables de la producción y eyección de la leche.
También es importante tener en cuenta el tiempo que ha transcurrido desde que se bebe hasta que se da el pecho. El alcohol pasa rápidamente al torrente sanguíneo, pero también sus niveles descienden rápidamente. Alcanza su máximo nivel entre los 30 y los 60 minutos después de haber bebido, por tanto si vas a tomar una copita, sería conveniente hacerlo después de una toma ya que pasarán unas tres horas hasta la próxima toma y en ese momento el nivel de alcohol será muy bajo o nulo.
El problema se plantea con los bebés recién nacidos, en los que las tomas son muy seguidas y varias veces al día, incluso también durante la noche. Por eso se suele recomendar mantener la abstinencia durante los tres primeros meses del bebé. En ese caso, será mejor esperar a que el niño crezca y las tomas sean más espaciadas.
En conclusión, si no puedes evitarlo y quieres tomar una copa en el período de lactancia, puedes tomar una pequeña cantidad de alcohol de forma ocasional y siempre alejada de las tomas.
CAFEÍNA
Las mujeres embarazadas que consumen cafeína, ya sea de café o té, tienen bebés más pequeños que las que se abstienen del estimulante durante el embarazo, sugiere una investigación recientem (Reuters Health, News . Caffeine in Tea, Coffee May Be Equally Risky to Fetus. By Anne Harding, November 27, 201. LING-WEI´-CHEN, The American Journal of Clinical Nutrition, en línea el 19 de octubre).
Incluso las mujeres que tomaron menos de 200 miligramos de cafeína, que es el límite seguro durante el embarazo según el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos (American College of Obstetricians and Gynecologists, ACOG), tuvieron un riesgo significativamente mayor de dar a luz prematuramente o de tener un bebé con bajo peso al nacer.
En un correo electrónico Ling-Wei Chen, autora líder del estudio e investigadora del Colegio Universitario de Dublín en Irlanda, señaló: "Basándonos en las asociaciones consistentes que observamos, y debido a que muchos embarazos no son planeados, recomendaríamos a las mujeres que están embarazadas o que buscan quedar embarazadas que al menos limiten su consumo de café y té con cafeína",
En la mayoría de esos estudios, el café fue la principal bebida con cafeína consumida. Para el estudio actual, el equipo de Chen observó a 941 parejas madre-hijo nacidas en Irlanda, donde la gente bebe más té que café. Casi la mitad de las madres del estudio bebieron té, mientras que cerca del 40 por ciento bebieron café.
Cada 100 miligramos adicionales de cafeína consumidos diariamente durante el primer trimestre del embarazo se asoció con una reducción de 72 gramos (2.5 onzas) en el peso al nacer, así como una reducción significativa en la edad gestacional, la longitud del parto y el perímetro cefálico.
Las mujeres que tomaron la mayor cantidad de cafeína tuvieron bebés que pesaban unos 170 gramos (6 onzas) menos que los que consumían menos, encontraron los investigadores. Si la cafeína provenía del café o del té no causó ninguna diferencia en los resultados. "La alta ingesta de cafeína puede resultar en un flujo sanguíneo restringido en la placenta, lo que podría afectar posteriormente el crecimiento fetal", explicó Chen. "La cafeína también puede atravesar la placenta fácilmente, y debido a que la eliminación de la cafeína se ralentiza a medida que avanza el embarazo, la acumulación de cafeína puede ocurrir en los tejidos fetales."
Una taza de 12 onzas (355 ml) de café colado contiene aproximadamente 200 mg de cafeína, pero el té generalmente contiene menos cafeína y la cantidad puede variar según el tipo de té y el tiempo que se haya colado. La compañía Lipton Tea, por ejemplo, dice que su té negro contiene alrededor de 83 mg de cafeína en una taza de 12 onzas.
El público no parece dar importancia al contenido de cafeína del té, señaló la autora principal del estudio, Catherine Phillips, investigadora del Colegio Universitario de Dublín. "Por lo tanto, la ingesta materna tanto de té como de café debe tenerse en cuenta al tratar de reducir al mínimo la ingesta total de cafeína durante el embarazo.
La ACOG afirma que consumir menos de 200 miligramos de cafeína al día durante el embarazo "no parece ser un factor importante que contribuya al aborto espontáneo o al nacimiento prematuro". La Organización Mundial de la Salud recomienda que las mujeres consuman menos de 300 mg de cafeína al día durante el embarazo.
CAFEÍNA Y LACTANCIA
La cafeina contenida en el café y las bebidas de cola pasa a la leche materna, pero sólo a dosis altas (si la madre ingiere tres tazas al día o más de café) se producen insomnio o irritabilidad en el bebé; algunos lactantes son más sensibles, y con menos dosis ya presentan síntomas.
Otro aspecto es la hora a la que se ingieren las bebidas: la cafeína tiene una vida media de unas 5 horas, esto quiere decir que tras ese tiempo gran parte de la dosis se ha eliminado, y por tanto se puede tomar café o un poco de bebida de Cola 5h antes de dar el pecho.
